Oficiada Misa del Deporte en Ciudad Bolívar

Este jueves 6 de Enero como en años anteriores el país se reúne en torno a la Misa del Deporte, una tradicional liturgia que hermana a los venezolanos y que también renueva el compromiso y la fe deportiva de los dirigentes, entrenadores y atletas que conforman el universo deportivo de Venezuela.

Esta ceremonia fue oficiada por primera vez el Día de Reyes de 1945 por el Monseñor Francisco Castillo Toro en honor al trágicamente fallecido e insigne beisbolista José Pérez Colmenares. Este prestigioso evento religioso se ha venido realizando durante varios años en la Catedral de Ciudad Bolívar y este año contó con la presencia de la viceministra del deporte de Alto Rendimiento, Elsa García así como altos funcionarios del deporte regional.

La Misa del deporte en Ciudad Bolívar es organizada por la Gobernación del Estado Bolívar a través del Instituto de Deportes del Estado Bolívar (Idebol), donde después de la liturgia religiosa continua la entrega de ofrendas y reconocimientos, como acto de renovación del compromiso y la fe deportiva de dirigentes, entrenadores y atletas en general.

Seguido de la entrega de ofrendas al padre de la patria, por parte de los invitados especiales como lo fueron: el Secretario General de Gobierno, Teodardo Porras; en representación del ciudadano Gobernador del Estado Bolívar, al igual que Ovanny Aguirre, Sergio Hernández, la viceministra del deporte de rendimiento, Elsa García y demás secretarios y directores del Gobierno Regional, asimismo asistieron el presidente de Idebol, José Perazzo y su esposa Mery de Perazzo.

Prosiguió el acto con las gloriosas notas del Himno Nacional y del Estado a cargo de la Banda de Conciertos Juan Bautista Dalla Costa Soublett, seguida de palabras de bienvenida del presidente de Idebol, José Antonio Perazzo; refiriendo, que “como ya es costumbre, todos los seis de enero el deporte nacional se da cita en la tradicional Misa del Deporte; liturgia que nos hermana como venezolanos desde hace 65 años” señalo Perazzo

Posteriormente se dio inicio a la entrega de reconocimientos al atleta del año 2010, Rubén Limardo; mención atleta del año, Giovanna Blanco; atleta con discapacidad del año, Ivanoski Marichal y un reconocimiento especial como Maestro Internacional de Ajedrez, Daniel Pulvett; asimismo, se premió como entrenador y dirigente deportivo a Katiuska Santaella, mención entrenador del año, Yosghle Romero de kickingball, asociación del año, como lo fue la de judo recibido por Katiuska Santaella; mención asociación deportiva.

De igual manera, se premió a las parroquias más activas, siendo galardonadas: José Antonio Páez, Agua Salada y la Parroquia Marhuanta; al medio de comunicación del 2010, Diario El Luchador; periodista del año, Luís E. Muñoz; programa de radio más destacado del 2010, Universo Deportivo, de José Alberto Zurita.

Para finalizar, el Secretario General se dirigió a los presentes en nombre del Gobernador Rangel Gómez; dando gracias al Instituto de Deportes, guiado por José Perazzo, por su destacada labor en el deporte regional tanto en atletas de alto rendimiento como en el deporte comunal, aludiendo y exhortando igualmente a los deportistas destacados, “no se olviden de sus raíces y rieguen la tierra que los vio nacer, recuerden que detrás de ustedes está un grupo generoso de chicos que necesitan de su experiencia, y para esos jovencitos les digo que sigan el ejemplo de estos forjadores de patria, ya que ese es el camino para vencer.

Es importante recordar, que decir deporte para todos, es hablar de masificación deportiva como primera prioridad y constituye el hacer llegar la acción deportiva como política de inclusión; es por ello que una de las tareas de Idebol para este nuevo año, es acompañar a los consejos comunales para que presenten proyectos en materia deportiva, tales como construcción de canchas, iluminación, parques y muchos más.

Algo de Historia.

Jose Pérez Colmenares, fue un pelotero amateur de nuestro país nacido en Villa de Cura, estado Aragua, apodado “El Terrible Pérez”, insigne bateador y un gran jardinero que precisamente apoyado en sus números se integró al grupo de venezolanos que conquistó en Cuba la Serie Mundial Amateur en Octubre de 1941. En ese torneo fue uno de los puntales del elenco criollo, al promediar .275 puntos, con once carreras anotadas y cinco impulsadas. En su vida peloteril, además de la selección nacional, vistió los uniformes de Magallanes, Vargas, Cardenales, Valdés, Princesa y Cervecería Caracas. Su trágica e inesperada muerte se produjo el 25 de julio de 1944, al incendiarse en el aeropuerto de Barcelona el avión en el cual viajaba.